Emociones

En nuestros dias, el tema de la decadencia de los valores éticos, es una discusion que tiene gran reserva en variados escenarios tanto cotidianos como académicos. En cada momento nos preguntamos, por la  recuperación de un antes, bien visto, bien aceptado o almenos diferenciado a lo que se nos presenta a nuestros dias de forma tan ramplona en episodios cotidianos y sencillos de la vida familiar.
Es interesante seguir a Heidegger al respecto, bajo el presupuesto de la reivindicación de una ética.
Bien se  podría, indagar al respecto en el autor,  y escudriñar sobre todo en el primer Heidegger desde 1923 a 1927. Rastrear huellas sobre el ámbito ético en los escritos y postulados en Ser y tiempo de 1927, seguramente se encontrarán caminos de apertura al respecto. En tal caso, Seguirle la huella a lo auténtico e inauténtico en la condicion de aperturidad y afectividad se podrían ubicar mojones de sentido sobre una apuesta. Sin embargo el mismo Heidegger es muy puntual al referirse al tema, en su texto carta sobre el humanismo de 1941, donde aborda explícitamente el tema y le da salida desde sus argumentación sobre la discusión de lo humano y lo que se ha ido tejiendo entorno a las formas en que aparece el hombre, donde el problema no es el hombre y los discursos que se han ido matizando en las diferentes épocas, sutiles y menos sutiles, pero que siempre decantaron o no se apartaron de lo mismo.
"El problema para Heidegger es la forma de pensar del hombre occidental".
Un pensar que es incierto desde sus orígenes, arropado en la pseudodeterminación de la utilidad cálculada, la determinación y sobre delimitación real ha tomado carne y vuelo en el hombre, sustentando esquemas que convalecen en la afirmación y la veracidad. Este saber es una forma de pensar, autentica o no, originaria o no, es para Heidegger lo único que tiene el hombre con sus raíces occidentales para pensar y asumir el mundo.

El sentido que Heidegger toma al término sorge o cuidado en términos de Eduardo Rivera, aun es nuestro tema de exploración. Ahí el término cobija ya sobre su propio sentido una apertura o una comprension por el sentido del ser del ente, capaz de pensar, remisor de sentido y transgresor del mismo. Esta dirección se halla  aun inexplorada, sin caminos abiertos a su fundamento. Quizá, porque el fundamento mismo se hace y deshace en las profundidades metafísicas que desbordan el actuar del hombre.
En el presente escrito, se plantean dos momentos de reflexión. El primero es la narración del video, las emociones, donde se hace una revisión general de los cinco momentos que señala el video, para mostrar precisamente el ámbito de la emoción, como fundamento mismo del actuar. El segundo, hace una reflexión en torno a la tercera tesis de la ética del cuidar de Francess Torralba, donde se plantea una correlación con el video, intentando mostrar la importancia de la emoción en tanto una condicion espacial de la existencia.

Y en tu vida, ¿Qué es lo que más deseas?  Enlace al Video


Este video Thailandés, es una recopilación de cinco momentos, centrados en cinco personajes diferentes, el video dura solo tres minutos y logra presentar de una forma arrolladora el sentido del cuidado y la emoción desde la cotidianidad.  El primer momento muestra a un hombre caminando de frente por una calle, de pronto siente un chorro de agua sobre su cabeza, al instante, en lugar de explorar o dejar avivar la ira, simplemente mira que a su lado hay una mata casi muerta, así que la corre para que se alimente del agua que se desperdicia. El segundo momento muestra como en su recorrido ve a una mujer intentando subir un carro de comida sobre un andén, lo cual le resulta difícil para la mujer por su peso. Sin embargo el hombre se acerca y comparte su fuerza con la mujer y juntos logran subir el carruaje sobre el andén.
El tercer momento hace ver al hombre comiendo en un restaurante, y de pronto se le acerca un perro, y le extiende la mano, el hombre con alegría, saca un pedazo de la presa de pollo que come, y la comparte con el animal. El perro mueve la cola como gesto de complacencia.

Luego se pasa al cuarto momento, donde se ve como sobre otra calle encuentra a una mujer pidiendo limosna, con su pequeña hija, y sobre los pies de las dos, hay un letrero que dice: “PARA LA EDUCACIÓN”.  El hombre se acerca, saca su cartera y entrega el billete de más valor sobre la vasija de la méndiga, la niña inclina un poco la cabeza, intentando dar las gracias con el gesto, Al frente de donde están, hay un hombre anciano que está al tanto de lo que sucede, y solo mueve la cabeza con un gesto de estupidez para con el hombre que atiende  a las dos mujeres. El quinto momento deja ver como el hombre, al llegar a su residencia, coloca un racimo de bananas colgadas sobre la perilla de la puerta frente a su apartamento, luego sale una mujer anciana y los toma, la mujer se ve asombrada porque no sabe quién le coloca ahí, y sin embargo los toma con agrado.
El video pregunta explícitamente, ¿Qué es lo que recibe por hacer esto todos los días? Y al instante renueva los cinco momentos para mostrar como este hombre hace exactamente lo mismo todos los días, y la respuesta es:

 “no recibe nada”. "No va a ser más rico, no parecerá en la televisión, todavía anónimo y no un poco más famoso".

El video continúa pero al llegar al cuarto episodio, se muestra lo inquebrantable del mensaje, el hombre llega al lado de la mujer y la hija que piden limosna para la supuesta educación de la niña, pero en esta ocasión solo está la mujer, su hija no aparece. El hombre mira con asombro la ausencia de la niña, sin embargo se escucha  un grito donde la niña llama a su mamá. De pronto el hombre voltéa un poco a mirar de donde proviene la voz y la logra ver a varios pasos de donde esta él. La niña está con un uniforme de color  blanco y una falta azul, esta con el uniforme de su escuela,  su maleta con los libros sobre la espalda, y apenas regresa de estudiar.
El hombre mira detenidamente con alegría y emoción lo que sus ojos le permiten vivenciar. Este momento es quizá el punto de más nostalgia, pues ahí la vivencia llena o cubre nuestro vacío, un vacío que es generalizado y comúnmente aceptado. Explícitamente olvidado, quizá estas imágenes lo que nos trasmiten es un regreso a nuestra perdida, a la ausencia de lo que nos volvió extraños, y es caótico que tome lugar de forma tan abrupta en jóvenes de solo trece y catorce años. Ello muestra súbitamente el lugar de la consigna y el agenciamiento que nos aleja del cuidado y las emociones.
Este video fue de interés matizarlo con la tercera tesis de la ética del cuidar de Francess Torralba:
 “cuidar es resolver el cuerpo de necesidades el otro”.  La tesis de Torralba en sí misma es ambivalente, en el sentido de que, puede dar a entender que el cuidado es resolver todo lo que materialmente necesita el cuerpo del otro, y llega a la discusión sobre cuáles serían las necesidades básicas o fundamentales del hombre, y su jerarquización. Aun así, el video muestra que resolver las necesidades del otro, el cual es cualquiera, no tiene más que el cuidado de ti mismo en lo que puedes resolver en el otro. Resolver es dar respuesta, entregar un resultado no teorético, abstracto o metafísico, el resultado es desde el aquí y el ahora, en lo que tu vivencia puede vivenciar, puede cobijar y entregar. Nada más.

De este modo, la tercera tesis señala la generalidad del cuidado desde la comprensión del Cuidar, donde:

 “cuidar  de alguien significa tratar de resolver sus necesidades. El ser humano, en tanto que ser indigente, es un cuerpo de necesidades de índole muy distinta. En el proceso de cuidar se alivian las necesidades que experimenta el ser humano, pero no sólo las de orden físico, sino también las de orden psicológico, social y espiritual”.

El video, nos muestras claramente el aliviar las necesidades latentes de lo que el cuerpo necesita  , sin embargo Torralba toma en sentido amplio la afirmación del cuidar el cuerpo de necesidades del otro, ya que aborda intempestivamente la noción simple de un mero asistir al otro:

“En el fondo, cuidar no consiste sólo en resolver las necesidades del otro, sino en darle herramientas para que él mismo sea capaz de resolverlas por sí mismo sin necesidad de un cuidador. En el fondo, se trata de buscar la autonomía en la resolución de necesidades. Algunas necesidades se podrían evitar si el sujeto tuviera otro estilo de vida o lograra alcanzarla”.

Con esta afirmación, el cuidar el cuerpo de necesidades del otro, queda desbordado con el film, pues, en el fondo, solo se logra dilucidar solo una parte de la tesis tercera, en lo que respecta a ser solidario con el cuerpo de necesidades del otro, sin embargo tal como la concibe Torralba, se trata de una integralidad que dará cuenta de la autonomía que debe habitar en el sujeto de cuidado. De tal modo que el cuidador será un referente de posibilidad para que este encuentre su propio camino, un referente con herramientas para poder habitar su propia elección. Una elección donde cuente el mismo a la luz del otro. De la elección solo dará cuenta el que elige.
Hasta este punto, quedamos en el vilo de la etica del cuidar, pues se tendra que  mirar sin reserva que la elección es un acto libre, y el que da cuenta de ello, es el que lo elige, desajustado a cualquier carga moral. Y en este aspecto, Heidegger insistirá cobre el cuidado como la integralidad del Dasein, habituado en lo que le correpsonde como un ser de posibilidad, bajo una estrucutura unitaria, histórica, afectiva y correlacionada intrinsecamente al mundo compartido donde es posible habitar. De ello, que Lo autentico e inautentico como posibilidad de un referente ético en Heidegger, toma lugar en el ambito existenciario, es decir, desde la transgresión misma del termino medio, donde dicha transgresión actua intempestivamente a la luz de una apropiación de lo humano, como rescate del olvido de lo que tambien nos constituye, desde nuestros origenes. De ahí que las emociones asumidas como referente al escrito, se muestre como un pequeño oasis en el mundo de la vida que se consigna en el termino medio del mundo en que trancurrimos y discurrimos la vida.


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